LA LLEGADA DE STARLINK GENERÓ POLÉMICA DENTRO DE ANTEL

El presidente de Antel por el Frente Amplio (FA), Daniel Larrosa, criticó que no se presentó un informe sobre los impactos que podría llegar a tener la llegada al Uruguay de la empresa de Elon Musk, Starlink.

A mediados de marzo, la Unidad Reguladora de Servicios de Comunicaciones (Ursec) otorgó la licencia clase B a la empresa Starlink de servicio de internet satelital —propiedad del multimillonario Elon Musk—, lo que permitirá que pueda ofrecer esta modalidad de conexión en Uruguay.

La Ursec otorgó la Licencia de Telecomunicaciones de Clase B a Starlink Uruguay S.R.L. junto con la autorización para la prestación del servicio de transmisión de datos a través de su red de satélites de órbita baja en el territorio nacional, luego de que la empresa estadounidense realizara la solicitud correspondiente para ello, tal y como informó Ámbito a fines de enero.

Frente esto, Larrosa denunció que el expediente no tiene ningún de la Dirección Nacional de Telecomunicaciones (Dinatel), perteneciente al Ministerio de Industria, Energía y Minería (Miem), sobre los posibles efectos que tendría la llegada al país la empresa del mángate.

En ese sentido, aseguró que es un tipo de manejo común de a gestión actual. «Se aprueban cosas sin informes. Este es una forma de operar habitual durante esta gestión», indicó en diálogo con el programa de radio Nada Que Perder y agregó que lo mismo pasó con la portabilidad y con la decisión de los cableoperadores.

Lo bueno de Starlink

Respecto a las posibles ventajas que tendría la empresa de internet en el Uruguay, el presidente aseguró que sería una buena opción en sectores rurales donde la cobertura de Antel no llegue en un 100%, aunque admitió que el producto es mucho más caro, más lento y más inseguro.

“Si con tormenta eléctrica hay cosas que se quedan sin señal, en cualquier conexión satelital será aún más evidente; no hay con qué competir contra la fibra óptica”, dijo.

Por otro lado, aseguró que no sería una competencia para Antel, principalmente por el alto costo de instalación del servicio. «Competirá muy colateralmente, a menos que exista algún tipo de “dumping” como que te regalen la antena o el servicio. Puede tener un “efecto engaño”, o el argumento de llevarse la conexión a todos lados, pero eso ya se puede hacer con el servicio de Antel», comentó.

La aprobación de Starlink

El pedido estaba “a estudio” de la unidad reguladora, que prestó particular atención al impacto que la habilitación a un nuevo actor proveedor de internet podría tener en el mercado local que, hasta recientemente, funcionaba bajo el monopolio de la empresa estatal Antel.

Sin embargo, la Ursec resolvió habilitar a Starlink a operar en el país, en tanto consideró, entre otras cosas, que la empresa propiedad de Elon Musk cumple con la normativa vigente y que su red satélite opera en conformidad con lo establecido en el Reglamento de Radiocomunicaciones de la Unión Internacional de Telecomunicaciones.

Asimismo, tuvo en cuenta que la compañía informó tener en órbita 4.338 satélites y que se encuentra prestando servicios en varios países de América del Sur.

Para que las autorizaciones se mantengan, Starlink deberá efectivizar dentro de los próximos 30 días el pago de 50.000 UI —unos 298.995 pesos, al valor de la cotización actual— en concepto de obtención de la licencia clase B; y otros 7.377 dólares por la autorización del sistema satelital no geoestacionario.

La empresa de internet por red satelital también deberá “informar la cantidad de satélites integrantes de su red que se encuentren en condiciones operativas en dichas instancias”, cada año entre mayo y noviembre; y “suministrar en tiempo y forma a requerimiento toda la información que le sea solicitada referida a los servicios prestados, sus condiciones técnico-administrativas y los sistemas de telecomunicaciones empleados a tal fin”, según explicitó la resolución de la Ursec.