Amalia Granata se perfila como candidata de los libertarios para la elección de Convencionales Constituyentes en caso que el gobierno de Maximiliano Pullaro logre sacar la reforma de la Constitución de Santa Fe, una opción que podría concretar la Legislatura santafesina esta semana.
Granata se habría reconciliado con Javier Milei y ahora su nombre suena para encabezar la lista. La ex modelo se había distanciado de Milei antes de las elecciones presidenciales, entre otros motivos, porque su hermana Karina privilegió el vínculo con la ahora diputada nacional Romina Diez. Fue otro error político de la hermana presidencial porque Granata es por lejos la filolibertaria que más mide en Santa Fe.
Ahora, como los libertarios no tienen nombres de peso para la constituyente, donde el mismo gobernador Pullaro encabezaría la lista oficialista, Milei se vio forzado a una reconciliación con Granata, que aparece como la mejor opción para liderar la boleta de la Libertad Avanza.
Quien acercó a Granata con Mieli fue Santiago Caputo en medio de la interna por el armado de las listas que mantiene con Karina Milei. El asesor amenaza así con pisarle el territorio a Romina Diez, la elegida por la hermana del Presidenta para conducir la franquicia de La Libertad Avanza en Santa Fe.
El kirchnerismo cree que Perotti negocia con Pullaro habilitarle la reelección
En caso que este acuerdo avance, podría complicar los planes de Pullaro que, como adelantó LPO, negocia con el peronista Omar Perotti el apoyo a la nueva Carta Magna que tiene como eje la habilitación de una reelección consecutiva y pondría en carrera al radical para un segundo mandato.
La Casa Rosada lo tiene cruzado a Pullaro y la idea de La Libertad Avanza es impedir que se habilite la reelección de Pullaro, cercano a los radicales Martín Lousteau y Emiliano Yacobitti, dos enemigos de los libertarios.
Granata es la más feroz crítica de la reforma constitucional santafesina. La preocupación entre los radicales es que una Granata potenciada por la buena imagen de Milei en la provincia, termine ganando las elecciones de constituyentes y con esa mayoría impongan una Constitución libertaria y si reelección. Ese riesgo es el que advierten a Pullaro sus socios del socialismo, que no están muy convencidos de la oportunidad de la reforma.
La mediática levantó fuerte el perfil tras la aprobación de la reforma judicial provincial que prevé la ampliación de la Corte Suprema a siete miembros y cesantía automática para los jueces que cumplan 75 años, salvo acuerdo legislativo a propuesta del gobernador.
De esta manera, cinco de los seis jueces que integran el Máximo Tribunal y superan el tope de edad quedarían a tiro de decreto para su remoción, según la interpretación en la que coincidían oficialistas y opositores.
Para su aprobación, la coalición oficialista que lidera Pullaro, que cuenta con 28 de los 50 diputados provinciales, consiguió el acompañamiento de los cinco legisladores de Perotti y de los tres que aportó el bloque de izquierda Frente Amplio por la Soberanía que preside Carlos del Frade.
Pullaro obtuvo así más que una ley muy importante, la consolidación de una mayoría ampliada con el bloque de Perotti y de la izquierda, que lo deja a las puertas de conseguir la Reforma Constitucional que le permita la reelección y que podría tratarse esta semana.
En la Legislatura descuentan que los cinco diputados de Perotti acompañarán la reforma . Además, en el bloque de izquierda se dividiría a favor de la reforma el radical Palo Oliver y la socialista Claudia Balagué mientras que el periodista Carlos del Frade votaría en contra.
Granata dijo en la sesión que aprobó la reforma judicial que la Legislatura se había convertido en «una escribanía» y al gobernador lo nombró como Gildo Pullaro, por el mandatario formoseño: «Me da mucho miedo porque vamos camino a una monarquía», exageró. Ese sería el tono de la campaña para elegir a los convencionales constituyentes.