Ni el chaparrón que castigó a Buenos Aires frenó la noche: el Teatro Vorterix se llenó de paraguas goteando y ganas de bailar.
Formados en 2016 en la escena porteña, Palta & the Mood cruzan funk, soul y pinceladas de jazz con una naturalidad que contagia. Ayer repasaron sus primeros trabajos y mostraron músculo con temas de Love Business, el disco que acaban de lanzar: metales afilados, líneas de bajo que exigen mover los hombros y un frontman que, entre agradecimientos, solo pedía seguir al ritmo.
Poco más de una hora bastó para convertir la sala en pista de baile. El cierre llegó con una ovación que confirmó lo obvio: al groove de Palta & the Mood no lo apaga ni la tormenta más brava.