Hace unos días atrás, y tras el escándalo por la megaestafa de $LIBRA, una periodista hizo la comparación de lo sucedido con una inauguración de un supermercado durante la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner
A continuación te explicamos la diferencia:
La diferencia clave entre promocionar una criptomoneda y, por ejemplo, inaugurar un supermercado radica en el impacto de la acción, las normativas de los mercados financieros y el deber de un funcionario público.
1. Regulación de los Mercados Financieros vs. Actividades Comerciales Comunes
Las criptomonedas, aunque aún no están completamente reguladas en muchos países, suelen caer bajo normativas sobre fraudes financieros, manipulación de mercado y estafas piramidales.
Promocionar una criptomoneda desde la cuenta oficial de un presidente puede influir artificialmente en su precio, lo que puede considerarse un caso de manipulación del mercado o “pump and dump”, una práctica ilegal en la mayoría de los mercados financieros.Un supermercado es un negocio de bienes físicos con un impacto económico mucho más predecible y sin riesgo de colapso por especulación.
2. Uso de la Autoridad del Estado para Beneficio Privado
Un presidente tiene un deber de imparcialidad y no debería usar su cargo para favorecer o legitimar una inversión privada específica.
Inaugurar un supermercado puede considerarse un acto de promoción económica general, que no beneficia directamente a un grupo de inversores en un mercado especulativo. En cambio, promocionar una criptomoneda puede interpretarse como direccionar a los ciudadanos a invertir en un activo riesgoso con información sesgada o incompleta.
3. Conflicto de Intereses y Posible Enriquecimiento Ilícito
Si un funcionario público promociona una criptomoneda y luego esta colapsa, puede haber sospechas de que él o personas cercanas se beneficiaron de la subida y caída artificial del precio.
En cambio, si inaugura un supermercado, no hay una fluctuación de valor ni posibilidad de un fraude financiero masivo.
En resumen, lo ilegal no es necesariamente hablar de una criptomoneda, sino que el acto pueda ser manipulación de mercado, abuso de poder y conflicto de intereses, mientras que inaugurar un supermercado no implica ninguno de estos elementos.