Scholz podría ser destituido antes de fin de año y Alemania se encamina a elecciones anticipadas
La ruptura del gobierno alemán no tiene marcha atrás. La denominada «coalición semáforo» integrada por socialdemócratas, liberales y verdes se quebró el 6 de noviembre luego que Olaf Scholz echara del gobierno al ministro de Finanzas, el liberal Christian Lindner.
En ese marco, el canciller alemán dijo estar dispuesto a celebrar una moción de confianza en el Parlamento antes de Navidad y aclaró en un reportaje que «no estoy pegado a mi puesto».
Se rompe el gobierno alemán y podrían adelantar las elecciones
Scholz planteó que «hay que pensar qué es lo mejor y dónde tienen sus derechos los ciudadanos y los partidos que compiten con los otros partidos ahora en el Gobierno y los partidos representados en el Bundestag (el Parlamento alemán). Hay muchas cosas que hay que considerar».
«Y simplemente digo que estoy a favor de que esto ocurra porque también quiero que ocurra rápidamente. No quiero un nuevo mandato de los demás, sino sólo de los ciudadanos a través de un voto fuerte a favor del SPD», añadió.
Scholz había programado la votación para el 15 de enero pero las presiones indica que será este año, allanando el camino para unas elecciones anticipadas en marzo o antes, ya que, se descuenta que no contará con los votos para seguir en el cargo.
Scholz pierde apoyo en Alemania: sólo un 33 por ciento aprueba su gestión
En ese caso, el presidente Frank-Walter Steinmeier dispondrá de 21 días para disolver el Bundestag y deberán celebrarse nuevas elecciones en un plazo de 60 días desde el cierre del Parlamento.
Las encuestas ubican a la centroderecha de CDU (partido de Angela Merkel) y a la ultraderecha Alternativa por Alemania en segundo lugar. El oficialismo aparece tercero. Con este cuadro, todo indica que la formación de gobierno será muy compleja y con un alto riesgo de parálisis política.